El Proyecto de Reforma propone, en adición a la adecuación del contenido de las materias, dos cambios fundamentales:

1) Cambio de un plan que se imparte por anualidades a un plan que se imparte por semestres;

2) Cambio de un sistema anual con duración de 5 años, a un sistema semestral con duración de 10 semestres, organizado por asignaturas con valor de créditos, asignados en función del número de horas de trabajo docente y horas de trabajo independiente, calculadas por horas por semana, por semestre.

Derivado de estos cambios, cambian también:

a) El plan vigente, organizado por anualidades, se formuló sin asignación de créditos. El plan reformado se formula en créditos cursados en semestres; los estudiantes deben cubrir 434 créditos para poder optar por el título de Licenciado(a) en Derecho.

b) El Plan en la organización del programa de estudios vigente es 41 materias. Incluía 4 optativas, 2 en cuarto año, a escoger de entre 6; y 2 en quinto año, a seleccionar de entre otras 6.

El plan reformado contempla cursar los 434 créditos en 82 materias, de las cuales 74 son de carácter obligatorio común y ocho optativas obligatorias, de una oferta de ocho líneas de pre-especialización con 8 nuevas materias por cada línea; es decir, 64 nuevas materias. Los nombres de las nuevas materias aparecen más adelante en la siguiente página.

c) Las materias optativas del plan en liquidación se asignaban a albedrío del estudiante; el plan reformado orienta al estudiante en una de ocho líneas de pre especialización:

1. Lógica y Argumentación jurídica; 2. Administración; 3. Derechos humanos; 4. Derecho electoral; 5. Derecho privado y corporativo; 6. Derecho penal y criminalística; 7. Derechos Económicos, Sociales, Culturales y Ambientales; 8. Derecho social.

d) La forma de cursar el plan. Si un estudiante reprueba una materia en el plan en liquidación, debe repetir todo el año con una materia, sin poder tomar otras, lo que provocaba desánimo en los estudiantes; el plan reformado permite a los estudiantes continuar con una carga académica completa, recursando la(s) materia(s) no acreditada(s), siempre y cuando no se trate de materias seriadas. Esto ayuda a que se disminuya la deserción y a incrementar la eficiencia terminal en la carrera.

e) Flexibilidad del programa. Bajo el sistema de acreditación de asignaturas por créditos propuesto, los estudiantes podrán cursar materias no seriadas de forma adelantada, inclusive mediante estancias de verano, o cursándolas en otras Instituciones de Educación Superior con los que la Universidad tenga convenios de colaboración.

Por ello, esta reforma representa un importante esfuerzo para contar con un programa docente actualizado, flexible, pertinente, vinculado y orientado a formar en competencias tales como la eficiencia, eficacia, crítica, compromiso social y ética profesional.